¿Cuál es la diferencia entre un bidet y un bidet de baño?

Aunque muchas personas usan la palabra “bidet” para referirse al clásico bidet de baño —esa pequeña pieza de loza blanca junto al WC que estaba en la casa de los abuelos—, hoy existe una nueva generación de soluciones que cumplen la misma función de forma más práctica y accesible. La diferencia entre el bidet tradicional y el bidet moderno tipo Culify, es que el bidet antiguo de baño es más caro, más difícil de instalar y requiere de una obra completa en el baño. En cambio el bidet moderno, o accesorio bidet, se instala en tu WC sin complicaciones y cumple exactamente la misma función.

El bidet de baño tradicional: caro, difícil y necesita mucho espacio

El bidet clásico es una unidad aparte del inodoro. Para tener uno en casa, necesitas espacio adicional en el baño, rediseñar la distribución y realizar una instalación completa de cañerías y desagües específicos para su funcionamiento. En muchos casos, implica una remodelación completa, lo que no solo toma tiempo, sino que también requiere una pequeña fortuna.

No es raro que este tipo de bidets se asocien con casas antiguas o departamentos construidos hace décadas, donde venían incorporados en el diseño original del baño. Hoy en día, instalar uno nuevo desde cero es poco común, precisamente por lo complejo y costoso del proceso. Además, recordemos que las construcciones en Chile han ido achicando el espacio de los baños, buscando la utilidad percibida por la constructora en desmedro de la calidad de vida.

El bidet moderno: práctico, accesible y compatible

Frente a esto, surgieron alternativas modernas como Culify: un bidet autoinstalable que se adapta directamente al WC que ya tienes. No requiere obras, herramientas ni conocimientos técnicos. Solo necesitas desconectar la tapa del inodoro, colocar el bidet y reconectar todo. El agua se toma directamente de la misma conexión que alimenta tu tanque con un adaptador especial que incluye el kit del bidet.

Este tipo de bidet es compatible con el 99% de los baños y se instala en menos de 10 minutos. La mayoría de los usuarios valoran que puedan hacerlo por sí mismos, sin depender de un maestro ni romper nada.

Como comentó uno de nuestros clientes:

“Fácil de instalar, cómodo y funcional. Muy buena experiencia. Lo compré para probar y terminé comprando otro para el segundo baño.”

Otro usuario destacó:

“Muy fácil de instalar, no se requiere ningún conocimiento técnico. En menos de 10 minutos ya estaba funcionando.”

¿Cuál es mejor? La mayoría ya elige lo práctico

Ambos tipos de bidet cumplen con el mismo propósito: limpiar con agua después de ir al baño. Pero mientras uno exige tiempo, espacio y dinero para instalar, el otro se adapta a tu rutina actual sin esfuerzo. Esa es la razón por la que cada vez más personas en Chile y el mundo optan por soluciones como Culify.

El cambio no solo es funcional. Es una decisión práctica, económica y alineada con los tiempos actuales. La posibilidad de mejorar tu higiene sin remodelar tu baño es, simplemente, una mejor alternativa para la mayoría.

¿Y tú? ¿Cuál elegirías?

Si estás pensando en mejorar tu higiene diaria, pero no quieres embarcarte en una remodelación, el bidet moderno es la respuesta lógica. Cumple la misma función, se instala fácilmente y está al alcance de cualquier persona. Por eso Culify existe: para que limpiar con agua sea una opción accesible para todos.